China.- Un hombre de fe habló sobre la fuerte persecución que sufrió y que otros niños cristianos han sufrido debido a su fe, desde el acoso en la escuela hasta las restricciones a la libertad de pensamiento y expresión cristiana.
“Crecer como cristiano en en este país fue una experiencia muy difícil”, comentaron los chinos identificados solo como “Enoch” durante el evento paralelo del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas: ‘China prohíbe la fe cristiana para todos los niños del país’, organizado por la Campaña Jubilee.
Como su padre era pastor, la familia entera de Enoch fue monitoreada por funcionarios del Partido Comunista Chino, vecinos y cámaras de vigilancia las 24 horas del día. A la familia se le prohibió reunirse para adorar a Dios, mientras que a Enoch y sus hermanos se les ordenó que se abstuvieran de compartir su fe en la escuela.
“Solo quieren que alabemos al Partido Comunista de China”, subrayó. “Si se descubriera nuestra afiliación religiosa, recibiríamos un castigo de la escuela”.
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Para finalizar, el padre de Enoch fue llevado a prisión y detenido por su fe en Jesucristo. Mientras su padre estaba en prisión, Enoch enfrentó intimidación y amenazas por parte de sus colegas, maestros y funcionarios del gobierno.
“Enfrenté la rudeza de los maestros en la escuela, los funcionarios del gobierno amenazaron a mi padre, diciéndole que si no cooperaba con ellos, volverían a contratar a miembros del Partido para que vinieran a mi escuela a golpearme. También le dijeron que no podía ir a la universidad, porque soy de una familia cristiana y nunca pasaría la selección política ”, concluyó-
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